ENCUENTRO CON GOROSITO…
El 18 de julio se cumplieron tres décadas del atentado terrorista contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en Buenos Aires que provocó la muerte a 85 personas y dejó más de 300 heridos. Actualmente crece el temor por un nuevo ataque del grupo terrorista Hezbolá y de Irán en la región.
Una información que publicó el sitio de noticias argentino Infobae basado en un informe del Mossad, el servicio de inteligencia israelí, señala que parte de la célula terrorista que realizó el atentado, aún vive y opera en Brasil. LA misma que atacó la embajada de Israel en Buenos Aires con saldo de 29 muertos y más de un centenar de heridos en el año 1992.
Además de en Brasil, Hezbolá mantiene una presencia activa en otros puntos de Sudamérica. La ministra argentina de seguridad, Patricia Bullrich, ha declarado que el grupo terrorista hoy tiene células en la zona de la Triple Frontera (Argentina, Brasil y Paraguay) y en Iquique (norte de Chile) y Bolivia. Bullrich declaró al Canal de TV La Nación de Argentina: “Nuestra frontera con Bolivia es donde nosotros tenemos hoy el máximo nivel de alerta y seguridad del país”.
Bullrich explicó que el nivel de alerta en la frontera norte argentina, aumentó a raíz del memorando de entendimiento en materia de defensa, firmado por Bolivia y la República Islámica de Irán en julio del año pasado. Afirmó que en Bolivia hay miembros de las fuerzas Quds, uno de los brazos armados del régimen iraní. La ministra fue clara: “Hezbolá es un satélite de Irán. Algunas veces actúa solo y algunas veces bajo órdenes de Irán”.
La secretaria de Estado también señaló que la Embajada iraní en Buenos Aires “fue el centro de organización del atentado” la AMIA. “En ese momento, las fronteras no fueron cerradas inmediatamente. Hoy Argentina tiene protocolos claros con respecto a qué hacer preventivamente.
Según Luis Fleischman, profesor de Sociología y Ciencias Políticas en la Universidad Estatal de Palm Beach, en Florida: “La presencia de Irán en Latinoamérica es hoy más ominosa que cuando se perpetró el ataque contra la sede de la AMIA”.
Además de los vínculos con Hezbolá, el régimen de Teherán mantiene “relaciones amistosas con gobiernos extremistas de izquierda como Venezuela, Nicaragua y Cuba”, y con otros gobiernos latinoamericanos dijo el experto.
En junio de este año, la justicia argentina declaró de “acceso público”, un informe de inteligencia del año 2003, que sostiene que Irán le ordenó a Hezbolá atentar contra la AMIA. El documento fue elaborado por la ex Secretaría de Inteligencia (SIDE). Actualmente se denomina Agencia Federal de Inteligencia de Argentina, con el aporte del Buró Federal de Investigaciones (FBI), de los Estados Unidos. Dicho documento es conocido con la denominación de Informe Toma, e alusión a quien en ese momento dirigía la SIDE, Miguel Ángel Toma.
Toma explicó a Infobae que el Informe fue “la clave para cambiar la percepción y la comprensión del accionar del terrorismo islámico, encabezado por Irán y con su brazo armado Hezbolá”.
No olvidemos que en abril, la Cámara Federal de Casación de Argentina, máxima instancia de la Justicia Penal, dictaminó que el ataque a la Embajada de Israel (1992) y a la AMIA (1994), fueron ordenados por el régimen de Teherán y ejecutados por Hezbolá.
“Un Estado que organiza, proyecta, programa, financia, arma y ejecuta una acción terrorista en otro Estado soberano, tiene una responsabilidad que en algún momento y en algún tribunal internacional deberá asumir”, externo a los medios de comunicación, el juez de la Cámara de Casación, Carlos Mahiques.
Según el Informe Toma, ambos ataques, se produjeron como una represalia del régimen iraní, a la decisión del Gobierno argentino de suspender la asistencia en materia nuclear. El fiscal Alberto Nisman, que fue encontrado muerto en el 2015, se basó en el Informe Toma para desarrollar su investigación el atentado a la AMIA.
¡ Hasta el próximo encuentro…!
Dr.(c).Washington Daniel Gorosito Pérez