ENCUENTRO CON GOROSITO…
La temática de la Inteligencia Artificial (IA), y la discusión de su aplicación en los distintos ámbitos de la vida humana, ha generado una serie de eventos a lo largo y ancho del planeta donde se analizan las implicaciones de la misma, y resulta obvio decir que, en una de las áreas más importantes del quehacer humano, me refiero al ejercicio de la comunicación periodística, esta no ha estado exenta.
El Parlamento Europeo organizó un seminario sobre Inteligencia Artificial, en el qué entre otras personalidades, participó el director de la Agencia de Noticias ANSA (Agenzia Nazionale Stampa Associata) fundada en Italia el 15 de enero de 1945, Luigi Contu, quien afirmó que la Inteligencia Artificial ofrece “grandes oportunidades” al periodismo.
Refiriéndose a las intervenciones anteriores sobre el tema, del europarlamentario Brando Benifei y del subsecretario Alessi Butti, dijo: “Veo, sin embargo, la conciencia de las decisiones nacionales y europeas, que se esté afrontando un tema central para la democracia y para que la parte democrática del mundo tenga un rol fundamental para el progreso de la humanidad”.
Para Contu, “los daños producidos por la web y luego por las redes sociales” al sistema de información, sobre todo, pero no solo desde el punto de vista económico, son “irreparables”. Por lo que debemos estar dispuestos a afrontar el gran desafío de la Inteligencia Artificial, sin encerrarnos en un recinto, por temor a perder copias, copias, lo que sería una actitud equivocada y haría perder al periodismo su centralidad”.
Contu considera que la profesión periodística podrá continuar teniendo “un futuro”, también valiéndose de la Inteligencia Artificial para un trabajo cada vez más de calidad y los periodistas deberán cada vez estar más formados sobre los algoritmos poniendo en discusión una vez más los contornos de nuestra profesión sin apartarse de las normas del periodismo de calidad.
Dijo que en ANSA se está experimentando un sistema de clasificación de las noticias que pueden ser de gran calidad para perfilar contenidos, “hacerlos más simples de distribuir en las plataformas digitales”. Un archivo como el de ANSA con millones de textos, imágenes y videos, es un archivo seguro, certificado, y la Inteligencia Artificial puede ayudar a construir nuevos contenidos ensamblarlos y hacerlos utilizables para los suscriptores y la Web.
Frente a este, un gran hecho de Crónica, por ejemplo, un terremoto, se podrá tener a disposición en pocos minutos una historia multimedia de los terremotos en Italia, o en el mundo, mientras que hoy se necesitarían horas de investigación y lectura en los tres archivos separados. Un contenido que será siempre respaldado y trabajado por la redacción, por ejemplo, sobre la construcción de formas para una noticia, como un terremoto”.
“Estamos abiertos a la IA advirtió Cantú, pero reflexionó, que “nadie se ilusione”, con que pueda sustituir nuestro trabajo y espero que este error no lo quieran cometer los editores: ¿Cómo puede una máquina establecer la jerarquía de la noticia que proviene de un discurso de Joe Biden? ¿O relatar el gesto del Papa, la emoción de una obra de arte y dar testimonio de un día de guerra? ¿Cómo puede hacer elecciones éticas?
Este trabajo lo podrá hacer sólo un hombre, un periodista. Que, por otra parte, tiene la responsabilidad penal y civil de aquello que se escribe y se publica.
Posteriormente el administrador delegado de ANSA, Stefano De Alessandri, afirmó que la Inteligencia Artificial “revoluciona la creación de contenido”. “Me ocupo de los medios hace cuarenta años, y asistí, no como periodista sino como gerente, a la introducción en nuestro mundo de varias tecnologías, desde el satélite, al celular, luego devenido en smartphone, o internet”.
Estas innovaciones siempre incidieron sobre el sistema de distribución, aumentaron la platea, con efectos negativos y positivos. En cambio, la Inteligencia Artificial revoluciona un aspecto fundamental: la creación de su contenido y no la distribución. Por lo tanto, estamos ante un momento trascendental y agregó “hay grandes oportunidades, además de riesgos”. La Inteligencia Artificial lleva, por ejemplo, al interior de los medios una posibilidad de innovación.
Hay una tendencia a cosechar los beneficios a corto plazo, es decir, mayor productividad, haciendo el trabajo más eficiente. Si miramos más adelante, están las cuestiones de la creación de nuevos productos y de la apertura de nuevos mercados. Todavía más adelante, y es una nebulosa, se asoma un nuevo ecosistema, y aquí predecir los impactos es casi imposible.
El administrador delegado de ANSA concluyó: Internet avanzó hacia una desregulación total. Al mundo de los medios llegó en 1993- 1994 mientras la directiva sobre el copyright es de 2019 y se implementó en los últimos meses: fueron necesarios 30 años. El hecho de que el Parlamento Europeo se esté ocupando hoy da esperanza de que los efectos negativos se abordarán de forma eficaz”.
¡Hasta el próximo encuentro…!
Dr.(c).Washington Daniel Gorosito Pérez