Texto y fotos: Juan José López Luna/Irapuato,Gto.-Con un lleno en el viejo coso Revolución y ambiente por demás festivo, se dio la corrida extraordinaria para despedir al rejoneador español Pablo Hermoso de Mendoza, estando colgados en el cartel Joselito Adame y Francisco Martínez, quienes lidiaron toros de Montecristo y El Cármen, respectivamente resultando un festejo como hacía mucho años ocurría, Pablo desorejó a sus 2 toros y Joselito hizo lo mismo, aunque a ambos la gente exigió el rabo en su segundo astado, pero el juez lo negó, mientras Francisco Martínez perdió al menos 3 orejas por fallar con la espada, al final le fue entregado el trofeo al rejoneador por ser su despedida, prometiendo el maestro Jazzamoart entregarle otro a José. La gente salió toreando de la plaza.
PABLO HERMOSO COMO LOS BUENOS VINOS
El torero a caballo de Navarra Pablo Hermoso de Mendoza, regresó a la legendaria plaza Revolución para despedirse del público irapuatense y vaya forma en que lo hizo, una cátedra fue la que dictó montado en sus jacas toreras, como un jabato salió en sus 2 toros y dejó regado el ruedo de su maestría, utilizando como capote y muleta las grupas de sus cuacos, templando la violenta embestida de los bureles y por ende haciendo la delicia de los amantes del arte del rejoneo, quedarán para la historia los quiebros y las florituras para poner a los toros en el sitio que requería para poner los rejones, banderillas y las rosas sobresaliendo un par a 2 manos en su primero. Dos orejas en su primer toro y otras 2 en el segundo con fuerte petición del rabo entre los clamorosos gritos de torero torero. Vueltas triunfales con el ganadero dio Pablo y al final fue levantado y paseado en hombros en un adiós nostálgico. GRACIAS POR TODO SU ARTE MAESTRO.
JOSELITO TAMBIEN DEJÓ SUMAESTRÍA Y ARTE EN EL RUEDO
Joselito Adame, también regresó a la plaza irapuatense, casi recién desempacado de España, donde realizó una campaña exitosa, con su primero realizó una faena con su sello, la cual abrió con una larga de rodillas y ya de pie pegó unas verónicas muy mecidas, con la muleta aprovechó al máximo lo que traía el toro, tandas por derecha e izquierda sabrosas y templadas, too lo cual la gente le coreaba con fuerza, se tiró a matar y dejó una estocada suficiente para que doblara el burel y la gente pidió las orejas. Con su segundo no se veía para triunfo grande, pues el toro se agarraba al piso y se pensaba las embestidas, pero José lo fue sobando y dominando hasta meterlo a la muleta, obligándolo a pasar largo en derechazos y naturales, siendo las tandas más sentidas por ese lado izquierdo, pero cuando se armó Adame con la espada la gente comenzó a pedir que no lo matara y entonces siguió pegando tandas de naturales, derechazos, remates y otros adornos, contando con las mejores embestidas del burel y una y otra vez se pedía el indulto, hasta que Joselito sin pensarlo, citó a matar recibiendo y dejó el estoconazo entre la algarabía general, 2 orejas y bronca al juez por negar el rabo, que tenía bien merecido. Al final salió en hombros de la plaza.
FRANCISCO MARTÍNEZ PERDIÓ EL TRIUNFO CON LA ESPADA
El torero guanajuatense Francisco Martínez anduvo toda la tarde muy dispuesto para darles pelea a sus alternantes poniendo su valor y torería en ambos toros, recibiendo al primero con una larga de rodillas y toreando sabroso con el capote, con las banderillas en ambos estuvo más animoso que acertado, pero la gente se lo agradeció con fuertes palmas, con la muleta los toreó muy bien a los 2 bichos, pero sin calar mucho en los tendidos, sólo cuando se pone de rodillas y hace un trasteo de riñones, es cuando la gente lo aclama hasta con el grito de torero torero. Y tenía en su primero ganadas las 2 orejas, pero al tirarse a matar se dió a pinchar, lo mismo que en su segundo donde al menos tenía otra oreja en la bolsa.
