MANTENER ARANCELES, PIDEN ZAPATEROS A GOBIERNO FEDERAL

Alicia Arias/León, Gto.- Empresarios del calzado piden al gobierno federal mantener los aranceles un año más, por lo menos, para proteger su mercado y a las industrias del vestido y textil.

El presidente nacional de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), José Abugaber Andoine, dio a conocer que, ante la revisión anual que se hace de los aranceles a los productos de importación, la cámara que preside ya solicitó a la Secretaría de Economía (SE) mantener el nivel actual de los mismos, por lo menos durante un año más.

Así lo dijo durante el mensaje que ofreció esta mañana en el marco de la inauguración de la feria del calzado y marroquinería, Sapica, donde también destacó que la Concamin logró que el sector  calzado fuera considerado entre los cinco pilares de la estrategia industrial de México.

La industria nacional del calzado exportó en el 2022 un total de 34 millones de pares de calzado, con un valor de 900 millones de dólares. Esta es la venta al exterior más alta en su historia. El  sector generó 11 mil 800 empleos formales en un año, con lo que recuperó el 75 por ciento de los empleos que perdió por la pandemia de COVID-19.

Llegan a México 48 millones de pares de zapatos subvaluados

Mauricio Blas Battaglia Velázquez, presidente de la Cámara de la Industria del Calzado de Guanajuato (CICEG), demandó todo el apoyo del gobierno federal para combatir la piratería y la  informalidad.

Dijo que en el 2022 se importaron 130 millones de pares de calzado, la cifra más alta de la historia, pero tienen detectado que casi un 40 por ciento, el equivalente a 48 millones de pares, entraron en condiciones de presunta subvaluación.

“Siempre lo hemos dicho, no tenemos miedo a la competencia, pero debe ser con un piso parejo. Hasta la fecha no hemos podido equilibrar la competencia desleal que representa el calzado asiático”, aseguró el líder de los zapateros.

Agregó que necesitan el apoyo del gobierno federal para combatir la piratería y la informalidad porque “esta situación pone en riesgo la competitividad del sector, afecta a las empresas formales que se ven limitadas para competir en un piso parejo y pone en duda la permanencia de las empresas”.

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