EL AGUA UN RECURSO EN CRISIS: CEPAL 

ENCUENTRO CON GOROSITO…

Se llevó a cabo entre los días 1 y 3 de febrero, la tercera edición de los denominados Diálogos Regionales del Agua en América Latina y el Caribe, en la sede de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) en Santiago de Chile.

Este diálogo, organizado por CEPAL, se suma al evento Diálogos Globales sobre el agua organizados por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO),  en su sede mundial de Roma en noviembre del 2022, donde se concluyó que el agua, el saneamiento, la salud, los ecosistemas, los océanos, la energía, los sistemas alimentarios y la nutrición están completamente interrelacionados.

El acuerdo más importante de dicha reunión fue la creación de e implementación de una Agenda Regional del Acción para el Agua, la meta a lograr es avanzar en el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS), número 6 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que tiene como objetivo garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos.

Mario Lubetkin, Representante Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), externó: “Según estimaciones de la FAO, para el 2050, la producción mundial de alimentos tendrá que incrementarse en un 50%, en comparación con el año 2012, a fin de satisfacer la creciente demanda de alimentos. Si se mantienen las condiciones actuales, esto exigiría al menos un 35% más de agua dulce, es decir un tercio más”. 

Indudablemente el agua es el elemento clave para garantizar la seguridad alimentaria a nivel mundial. De acuerdo con informes recientes, el 80% de todos los daños y pérdidas por sequía es absorbido por la agricultura en países de ingresos bajos y medios, y el 35% de las pérdidas de alimentos por sequía a nivel mundial ocurre en nuestra región, América Latina y el Caribe; lo cual representa pérdidas en producción estimadas en 13 billones de dólares.

Por lo tanto según la FAO, sin una adecuada gestión del agua nos e podrán implementar las cinco vías de acción establecidas en la Cumbre sobre Sistemas Alimentarios de Naciones Unidas, que en el 2022 estableció: Garantizar el acceso a alimentos sanos y nutritivos para todos; adoptar modalidades de consumo sostenibles; impulsar la producción favorable a la naturaleza; promover medios de vida equitativos y crear resiliencia antes las vulnerabilidades, las conmociones y las tensiones.

La Agenda señala que la región debe avanzar hacia una transición hídrica sostenible e inclusiva que se basa en cuatro pilares de acción: 

  1. Garantizar el derecho humano al agua potable y saneamiento gestionado de manera segura a través de un gran impulso a la inversión en el sector, sin dejar a nadie atrás.
  2. Promover cambios regulatorios y normativos para fomentar el acceso equitativo y asequible, y así erradicar la pobreza hídrica, con instrumentos innovadores incluyendo tarifas sociales.
  3. Revertir las crecientes externalidades negativas asociadas a contaminación, sobreexplotación y conflictos socioambientales promoviendo la fiscalización y regulación.
  4. Pasar de un manejo lineal a uno circular para reducir la presión sobre el recurso hídrico, instaurando una tendencia al desacople entre la extracción y el Producto Interno Bruto (PIB).

Hoy el cambio climático está sometiendo a los recursos hídricos del mundo a un estrés sin precedentes. De acuerdo con cifras provenientes de investigaciones de la FAO, unos 300 millones de personas habitan en países que sufren escases de agua, y más de 733 millones, el equivalente al 10% de la población mundial, viven en países afectados por un elevado y grave estrés hídrico. Hemos vivido en los últimos años, inundaciones y sequías nunca antes vistas en algunos países y regiones del planeta, que son repercusiones del clima en el agua.

Somos conscientes que la agricultura depende del agua y representa el 72% de las extracciones mundiales de agua dulce, junto a otros sectores de la economía, por lo que es un elemento esencial para la Agenda 2030 del Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.

Si bien la concienciación sobre la importancia del agua para la agricultura y el desarrollo sostenible ha aumentado, la FAO sostiene que, para alcanzar todos los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), siguen siendo medidas más eficaces, integradas y coordinadas, unidas a una firme voluntad política para reconocer, valorar y gestionar el agua de manera holística e integrada. 

A modo de reflexión comparto la frase del investigador y biólogo marino Jacques- Yves Cousteau (1910- 1997): “Olvidamos que el ciclo del agua y el ciclo de la vida son uno mismo”.

       ¡Hasta el próximo encuentro…!

                                                        Dr.(c). Washington Daniel Gorosito Pérez

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