Carlos García/ León, Gto.- El síndico panista del Ayuntamiento de León, José Arturo Sánchez Castellanos, incurrió en violencia política de género contra la regidora de Morena, Gabriela Echeverría González, a quien tildó de “ignorante” y “cínica” en una sesión de cabildo, determinó el Tribunal Electoral del Estado de Guanajuato (TEEG), quien además impuso una multa de 4 mil 800 pesos y solicitó que se emita una disculpa.
“Por mayoría de votos el Tribunal declaró acreditada la infracción y le impuso una multa al considerar que algunas de sus manifestaciones durante una sesión de cabildo estereotipan a las mujeres como incapaces de realizar determinadas funciones públicas y tienen por objeto obstaculizar y menoscabar el ejercicio de su cargo”, difundió el TEE en un escueto comunicado.
La regidora de Morena celebró la resolución del Tribunal Electoral porque sentará un precedente que visibiliza la violencia política de género ejercida por el síndico en una sesión de Ayuntamiento.
“Me gustaría pedir una postura, que prendan los focos en el Partido Acción Nacional, para que hagan una evaluación y una preparación de sus integrantes”, dijo Echeverría González.
Pidió a la alcaldesa panista de León, Alejandra Gutiérrez Campos, a que coadyuve para que lo más pronto posible el síndico ofrezca la disculpa.
“No porque una mujer dirige el Ayuntamiento se tiene una nueva cultura institucional sobre el respeto de género. Muchas mujeres siguen teniendo acoso laboral y sexual por parte de algunos directores y no se atreven a levantar la voz”, externó.
La resolución debe ser un parteaguas para que en el Ayuntamiento se genere un debate de altura, de respeto y de cero tolerancia contra la violencia política de género, concluyó.
La violencia
En la sesión de Ayuntamiento, del tres de febrero, Arturo Sánchez Castellanos se enojó y tildo de “ignorante” y “cínica” a la regidora Gabriela Echeverría porque calificó al entonces presidente del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (SAPAL), Jorge Ramírez Hernández, de indolente por no indemnizar a las familias de los cinco trabajadores que murieron intoxicados en la planta de tratamiento de aguas residuales.
En la presentación anual del Consejo Directivo de SAPAL se generó un fuerte debate por el caso de los cinco trabajadores intoxicados en la planta de tratamiento, los panistas defendieron a Jorge Ramírez y los morenistas emitieron fuertes críticas.
Gabriela Echeverría acusó a Jorge Ramírez de corrupto y le exigió que renunciara a la presidencia de SAPAL por la indolencia e insensibilidad que mostró con las familias de los trabajadores fallecidos el 13 de noviembre del 2020.
Recordó que el presidente de SAPAL asignó un contrato millonario a su cuñado Enrique Aranda Flores. El organismo operador pagó 47 millones de pesos a la empresa Construcción y Servicios del Bajío – propiedad de Enrique Aranda- para rehabilitar el colector sanitario El Muerto.
El señalamiento provocó la furia del síndico del PAN, el ex priísta Arturo Sánchez Castellanos, quien calificó de “cínica” e “ignorante” a Gabriela Echeverría.