Alicia Arias/León, Gto.- A seis meses de haber entrado en vigor el Programa de Prevención del Delito y Participación Social, el gobierno municipal de León reporta un avance del 52 por ciento en la integración de comités ciudadanos. Son más de mil 200 personas en 262 comités trabajando en tareas de prevención.
La meta es conformar 500 Comités de Seguridad Urbana en igual número de colonias al terminar el año, entre ellos destacan 40 comités en igual número de colonias que reciben atención prioritaria e intermedia porque se realiza un trabajo más profundo debido a que en ellas se concentra el 32.7 por ciento del histórico de llamadas al 911, puestas a disposición, detenciones por parte de las policías, etc.
Son los primeros seis meses de trabajo con el nuevo modelo de prevención ciudadana, un modelo que, a decir del responsable de su implementación, el titular de la Dirección de Prevención del Delito y Participación Social (DPDPS) de la Secretaría de Seguridad, Prevención y Protección Ciudadana (SSPPC), Moisés Herrera Saldaña, está dando buenos resultados porque la gente se está involucrando, participa y comprende de mejor manera lo que es la prevención.
AVANCES EN COLONIAS PRIORITARIAS
De las 40 colonias de atención prioritaria e intermedia, en cinco ya concluyó una primera etapa del trabajo que se desarrolla mediante la implementación del modelo de intervención integral. Estas colonias son: León 1, San Felipe, Los Ángeles, Presidentes de México y Revolución.
En estas zonas se prioriza la acción preventiva, no solo de la secretaría de seguridad, sino de toda la administración municipal a través de la Comisión Municipal de Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, integrada por más de 25 dependencias del gobierno local.
El trabajo en las cinco colonias consistió en crear los comités de vecinos, realizar mesas de trabajo para la detección de los problemas, elaborar un diagnóstico, proponer acciones para la solución de la problemática y el seguimiento respectivo.
Ahora hacen mesas de trabajo con las y los vecinos para informar lo que ya se hizo y se realizan acuerdos para las problemáticas que los vecinos identificaron en este proceso formativo.
Actualmente, la dirección de prevención está levantado información para medir si la gente percibe que las acciones realizadas tuvieron un impacto, esto obedece a que “uno de los elementos más importantes de la intervención es el diagnóstico participativo, en el que se hace recorrido calle por calle, se plasman todos los hallazgos y, en reunión con vecinos, se presentan y se priorizan de acuerdo a la importancia que ellos dan como parte de la problemática”, explicó en entrevista Moisés Herrera Saldaña.
La colonia Revolución será la primera en contar con una evaluación para tener certeza de la opinión de las y los ciudadanos. Un primer levantamiento de datos arrojó que el 80 por ciento de las personas consideró que es más segura la colonia y más del 60 por ciento sí percibió las acciones del Municipio.
INTERVENCIONES MÁS PROFUNDAS
El trabajo de la Dirección de Prevención del Delito y Participación Social (DPDPS) se ha ido adaptando a la realidad, pues, al ser programa que se trabaja en base a un modelo multidimensional de atención, “atiende de manera general a toda la población y, a parte, a hace un esfuerzo, que es un parámetro internacional, que consiste en la focalización de esfuerzos”, explica Herrera Saldaña.
“Aunque no era una finalidad, se ha capacitado a la gente en conocer los orígenes de la conducta delictiva, es decir, qué se debe entender por prevención. Por ejemplo, en la primera etapa se detectó que la gente era muy situacional. Decían que faltaba una lámpara, limpiar un baldío o recuperar un espacio deportivo, y se han dado cuenta de que eso es importante, pero más importante es ubicar el fondo, como detectar casos de mujeres víctimas de violencia, niños, niñas, adolescentes; que se de atención personalizada y seguimiento”, señaló el entrevistado.
“No es mejorar lo inmediato sino que tiene que ver con procesos más seguros de conformación de equipos”
Moisés Herrera Saldaña
Para la dirección de prevención este tipo de intervenciones empiezan a ser más profundas porque, en materia de prevención, el objetivo “no es mejorar lo inmediato sino que tiene que ver con procesos más seguros de conformación de equipos” para la elaboración del diagnóstico, en el que se consideran cuatro ámbitos de la prevención: situacional, social, comunitario y psicosocial.
Al principio, “casi todos los diagnósticos eran muy situacionales, después vieron que había temas de prevención comunitaria, es decir, la organización vecinal, la conformación de equipos de prevención social. La prevención social es de más largo aliento porque hay que mejorar los temas educativos, movilidad, acceso a los servicios básicos, empleo, y el tema psicosocial, que es individual”, explicó el responsable de la política de prevención social en León.
INFANTES, JÓVENES Y MUJERES LOS QUE MAS AYUDA NECESITAN
En este primer semestre de intervención en las colonias, la dirección de prevención ha diagnosticado que son las niñas, niños, jóvenes y mujeres quienes más ayuda necesitan por ser quienes enfrentan más problemas.
En los diagnósticos que realizan en cada colonia y en los que participan diversas dependencias municipales, se detectan los problemas que viven en cada colonia, y así se determinan las acciones a realizar; por ejemplo, si una menor es víctima de violencia intrafamiliar, la dirección de prevención elabora un escrito sobre el caso y lo envía en sobre cerrado a la dependencia respectiva, como es el DIF, instancia establece el elabora el programa de atención y se da seguimiento, siempre reportando a la dirección de prevención, como encargada del programa.
Son tres las dependencias que han tenido la mayor demanda de atención especializada: el DIF y los institutos Municipales de la Juventud (Imju) y de la Mujeres (IMMujeres).
Los apoyos más comunes que requieren los infantes, juventudes y mujeres consisten en terapias psicológicas, asesoría legal, atención médica, servicios de protección de menores, tareas asistenciales derivadas de la pobreza, capacitación para el empleo, uso del tiempo, entre otros. Esto representa un seguimiento más amplio del habitual, explicó Herrera Saldaña.
CUÁNDO PARTICIPA LA GENTE
Para que la gente se involucre y participe tiene que creer en la autoridad que los convoca porque “los vecinos participan si ven que tiene sentido lo que están haciendo, si son escuchados y tomados en cuenta, si hay formalidad en los funcionarios. Que vayan, que los escuchen y cumplan lo que comprometen”, sostiene Herrera Saldaña.
Si los vecinos dicen: “están aquí –las autoridades-, nos hacen caso y, tercero, resuelven”, entonces van a participar.
“Los vecinos participan si ven que tiene sentido lo que están haciendo"
Moisés Herrera Saldaña
Una premisa de la dirección de prevención es establecer plazos de tres meses para el cumplimiento de las acciones comprometidas pero, si no se cumplen, la dependencia municipal responsable debe informar si o no y porqué, técnicamente, no es viable.
Esto obedece a tres objetivos: primero, que el programa de prevención fuera asumido por toda la administración; segundo, que todos le abonaran y, tercero, que así lo viera la ciudadanía.
“Hemos tenido reuniones semanales con colonos y hay un reconocimiento claro de que estamos ahí y qué se busca resolver”, y “no solo hay buena participación de la administración, que es lo mínimo indispensable, sino de los ciudadanos”, asegura el entrevistado.
Actualmente, la Dirección de Prevención del Delito y Participación Social atiende cada semana a un promedio de entre 7 y 8 mil personas que, en un municipio de 1 millón 700 mil habitantes, es poco pero “la parte importante es focalizar esfuerzos” entre las mil 500 colonias y 600 comunidades rurales que hay, defiende el preventólogo.
Para diciembre de este año se hará una evaluación del programa a la luz de los 3 mil 244 indicadores contemplados en el diagnóstico municipal de prevención social del delito y la delincuencia. Se conocerán sus alcances, en qué ha funcionado y en qué no.
Será la primera vez que en León se realice un ejercicio de esta naturaleza, y a nivel nacional “pocas veces se ha logrado medir algo así”, sostiene Moisés Herrera Saldaña.