Carlos García/León, Gto.- De los centros de Cómputo, Comando, Comunicaciones y Control (C4) se filtra información a criminales “que pueden privar de la vida a las personas”, reveló la secretaria Ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad, Sophia Huett López, al referirse al asesinato de policías cuando terminan su turno laboral.
En los últimos días tres policías de León, Silao e Irapuato fueron emboscados y asesinados cuando se dirigían a sus casas.
“Cuando hay fuga de información, cuando hay incluso corrupción, se pone en manos de los criminales el domicilio del policía. Tienen que cerrar más sus canales de información”, señaló la vocera de seguridad del gobierno del estado.
Personal de los C4 filtran información a medios de comunicación y a delincuentes, sostuvo.
“Se está fugando información, ya no en la parte de medios que sería la menos sensible, si no a otro tipo de personas, con otro tipo de intereses que pueden privar de la vida a las personas”, ventiló.
Huett López lamentó el homicidio del policía Segundo de Irapuato, Roberto Contreras, y de dos oficiales de León y Silao asesinados en menos de una semana.
“Tenemos que cerrar filas, no ver a los policías como elementos, porque al verlos como elementos son un componente que puede ser sustituible, los tenemos que ver como integrantes de una corporación”, pidió la secretaria Ejecutiva.
Agregó que los gobiernos municipales deben incrementar las medidas de protección para los oficiales.
Con una reforma legal se puede dotar de armas a los policías en sus días de descanso y cuando terminan el turno laboral, consideró.
Las secretarías de Seguridad deben mejorar la comunicación e implementar un protocolo porque los criminales esperan a que los policías terminen de trabajar para atacarlos, dijo.
“Si han tenido un tema de amenaza o han tenido un intento de corrupción o se ven obligados a ser omisos en su función, puedan hablarlo institucionalmente y pueda haber un esquema de protección”, recomendó Sophia Huett.
El asesinato de oficiales tiene relación con la disputa entre grupos delincuenciales y muchos son atacados porque hacen bien su trabajo y “resultan incómodos al crimen”, afirmó.