Milagros Tadeo/León, Gto.- En el estado de Guanajuato se registran 14 muertes de niños por cada mil nacimientos, en tanto, el nivel de mortalidad materna supera la media nacional, al igual que los embarazos en adolescentes.
Lo anterior lo recriminó el Secretario de Salud Federal, Jorge Carlos Alcocer Varela, durante su discurso dentro del “Foro Estatal de Líderes de Salud”, en donde además señaló que Guanajuato ha avanzado en materia de infraestructura y en acciones de salud, pero indicó, no ha podido revertir la tasa de mortalidad.
“Llego a un estado en donde por cada mil niños que nacieron en 2018 murieron 14, uno más que la media nacional y ahí pongo mi reflexión, comparado con la media están arriba o al menos cercano a ello (…) si lo comparamos con las estadísticas internacionales ahí tenemos de que hablar, la tasa de mortalidad infantil es de 16.04 en este estado contra el 14.72 que es la nacional (media), la fecundidad es un tema relevante tomando en cuenta de 15 a 19 años, es 78.6 y está por arriba de 77 del referente nacional”, resaltó.
“La razón de la mortalidad materna en 2016, los número para 2017 y 2018 están en proceso, pero en 2016 fue de 32.4 contra un 36.7 a nivel nacional y para terminar la lactancia es de 8.2 meses cuando la media es de 9.2”, agregó.
Previo a esto, el Gobernador del estado, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, instó al funcionario federal a ser el canal para pedir al Presidente, Andrés Manuel López Obrador, reconsideré la eliminación del Programa Prospera Salud, del cual dependen más de 237 mil familias guanajuatenses de escasos recursos.
“Decirles que con el Programa Prospera Salud atendemos a 237 mil familias guanajuatenses en más de mil 387 comunidades, estamos hablando de aquellas personas de escasos recursos que reciben servicios médicos de calidad y cirugías extramuros, recordemos que Prospera en el área de salud tiene un segmento muy importante”, dijo.
“Por eso quisiera pedirle al Secretario, Alcocer que ojalá pudiera hacer llegar el mensaje al presidente no solo son los 400 médicos y enfermeras que se quedarían sin trabajo, no sólo son 180 millones del Programa sino las familias a las que se atiende, para que ojalá a través de su conducto pueda reconsiderar este recurso”, concluyó.