ENCUENTRO CON GOROSITO…
Hace unos meses, durante la reunión anual de la Asociación Estadounidense de Salud Pública (American Public Health Association) se presentaron los resultados de la investigación “Sembrando aire sano”, que realizó la organización internacional The Nature Conservancy dedicada a la conservación de la biodiversidad y el medio natural. Fue fundada en 1951 y tiene 400 oficinas en 35 países alrededor del mundo entre ellos México.
Entre las conclusiones de la investigación citada encontramos que con una minúscula inversión de 4 dólares por habitante en algunas de las ciudades más grandes del mundo se podría contribuir a mejorar la salud de millones de personas, al reducir la contaminación y enfriar el aire en las calles urbanas, plantando árboles. Sabemos que los árboles limpian y enfrían el aire a nivel local y a escala global a fin de identificar los lugares donde una inversión en plantar árboles puede tener el mayor impacto en las vidas de las personas.
El estudio se realizó en sociedad entre The Nature Conservancy y el Grupo de Liderazgo Climático C40. El objetivo del mismo es suministrar a los líderes urbanos los datos necesarios que les permitan demostrar que las inversiones en plantación de árboles pueden mejorar la salud pública de sus ciudadanos. El investigador Rob Mc Donald, líder de la investigación considera que: “Los árboles urbanos pueden salvar vidas y son igual de eficientes que las soluciones más tradicionales, como colocar depuradores en chimeneas o pintar los techos de color blanco”.
El estudio demuestra que con una inversión mundial anual de 100 millones de dólares destinados a plantar árboles, se podía proporcionar la posibilidad de vivir en ciudades más frías a 77 millones de personas y una reducción medible de la contaminación por materia particulada a 68 millones de personas. Un dato terrible que integra el informe es que 3 millones de personas mueren cada año como consecuencia del efecto de la materia particulada fina: contaminación del aire por partículas tan ínfimas que pueden ingresar en el torrente sanguíneo y en los pulmones, y provocar enfermedades como el asma, cardiopatías y accidentes cerebrovasculares.
En las zonas urbanas gran parte de esta contaminación proviene de la quema de combustibles fósiles que incluye los motores de los automóviles. Los árboles son capaces de eliminar hasta ¼ de la contaminación por materia particulada en un radio de algunos cientos de metros, y cuando son plantados en los lugares correctos, pueden ofrecer una barrera muy eficaz, ya que filtran el aire viciado y protegen a los habitantes de la zona.
Los árboles pueden bajar la temperatura hasta unos 2º C y de esa manera ofrecen protección a las personas contra los efectos del cambio climático. Los árboles constituyen la única solución que limpia y enfría el aire a la vez, además de ofrecer otros beneficios como espacio verde urbano para los residentes, hábitat para la vida silvestre y retención del carbono.
La plantación de árboles es una solución que los líderes municipales de todo el planeta pueden y deben implementar en sus comunidades para reducir la contaminación del aíre y fungir como freno al cambio climático. Según Mc Donald, principal autor del estudio: “Los árboles solos no pueden resolver todos los problemas urbanos del mundo en relación con el calor y la contaminación del aire, pero son una parte muy importante de la solución”.
¡Hasta el próximo encuentro…!
Dr.(c)Washington Daniel Gorosito Pérez